El fundamento de esta elaboración es el mismo que el de queso fresco de vaca, con muy pocas variaciones tanto de ingredientes y utensilios como en el proceso .
En esta ocasión utilicé un cincho metálico ajustable con agujeritos.
Y lo dejé curando unos días para obtener un queso semicurado de sabor suave, fantástico.
Ingredientes
* 5 litros de leche fresca de cabra.
* La punta de cuchillo de cuajo en polvo (de venta en farmacias).
* La punta de una cucharilla de sal gorda.
* Sal gorda para las 2 caras del queso.
* 60 mililitros de agua.
* Aceite de oliva virgen (opcional).
Utensilios:
- Cincho metálico para queso:
- Caldero grande.
- Cucharón sopero.
- Cuchara larga de palo.
- Cuchillo largo.
- Colador.
- Paño de cocina.
- Tabla antideslizante.
- Rejilla metálica:
- Paraguas de gasa o protector antiinsectos.
- Cazuela de barro o recipiente de cristal, ambos casos con tapadera (opcional en caso de conservarlo en aceite de oliva). Modo de preparación
1. Colar la leche en el caldero grande:
Lo dejé drenando poco más de hora y media, y retiré el caldero pequeño con la pesa.
18. Salar las superficies de las dos caras del queso con sal gorda:
Debe madurar durante 2 semanas aproximadamente en lugar seco y fresco, durante los cuales se procederá de la siguiente forma:
19. Durante los 2 primeros días reposar el queso, SIN RETIRAR el cincho (para que no se deforme), en lugar fresco o en nevera si hiciese calor, colocándolo sobre un plato o cuenco del revés (cuya base sea lisa y mida, mínimo, el mismo diámetro que la base del queso) para que así drene el resto de suero que pueda contener y resbale por los laterales del plato:
Es un queso mediano y si se conserva en la nevera durará muchos días, aunque dudo que dure ni dos porque está buenísimo, muy sabroso y desaparecerá rápido.
No me pude resistir a probarlo nada mas cortar un trocito.
Creía que sería un queso bastante fuerte de sabor debido a la leche de cabra, pero me asombró el sabor tan suave y en su punto justo de sal, con una textura suave, muy agradable.
Mayor fue la sorpresa al cortarlo por la mitad, y ver que se habían formado unos preciosos ojitos por todo el interior del queso.
Sabroso y suave.
Fantástico queso para disfrutarlo con un buen pan.
Conservarlo siempre en lugar fresco.
25. El método de conservación en aceite de oliva, es otra opción. En este caso el queso madurará en el aceite y quedará son sabor más intenso.
- cortar el queso en 8 triángulos iguales. Luego se ladea cada triangulo y se cortan rodajas triangulares no muy gordas.
- colocar los trozos de queso en una cazuela de barro o recipiente de cristal, en ambos casos, con tapadera:
También se puede conservar entero dentro del aceite y así lo haré a la próxima vez, pues pienso que mantendrá más su sabor y textura inicial.
Dejé 4 trocitos envueltos en plástico y dentro de la nevera, cada día probaba un poco para investigar si el sabor variaba.
Efectivamente, según pasan los días el sabor se vuelve más fuerte, pero no demasiado. Va cogiendo más sabor.
Supongo que si no se mete en aceite, irá adquiriendo un sabor más fuerte según pasan los días.
Mantener siempre en lugar fresco.
4 comentarios
Muy bien explicado.
Con permiso me quedo por aqui para aprender.
Muchas gracias.
Gracias a ti Maria José
Por supuesto trastea cuanto quieras
un abrazo
Estoy TAN emocionada y MUUUYYY agradecida de haber encontrado ésta receta de queso que se ve fácil de elaborar y me anima a tener el valor de hacerlo!!
Gracias también por la explicación tan clara y coherente!
Ahí les cuento que tal salió cuando lo haga 😉
Hola Chiri
Me alegro te haya gustado. Es relativamente fácil elaborar este queso de categoría, buenísimo.
Eso espero, que me comentes que tal te quedó.
Un saludo.